Y escuché las palabras del Iluminado,
cuando contestaba mi pregunta:
- Maestro,
¿Qué debo hacer para que mi hijo me siga amando como a un ídolo cuando crezca?
Y el Iluminado me contestó:
- Trata de que el barro que forma tus pies sea tan fuerte que se rompa solo después que tú hayas muerto…
Luego de escucharle, hice una reverencia respetuosa y me aleje de su lado,
mientras meditaba en la profundidad de las palabras del Iluminado…
Por Ezequiel (César Santos Jr.)
28 de Junio de 2012